La ruta patagónica del vino: opciones imperdibles
Vinos australes de la Patagonia andina
De la amplia y variada oferta de la ruta patagónica del vino, una selección de destinos imperdibles para disfrutar, aprender y conocer.
En la provincia de Chubut, regiones de la ruta patagónica del vino como Trevelin y Sarmiento son el hogar de interesantes viñedos. Estos parajes fríos y ventosos producen vinos únicos, como el elegante chardonnay y refinado pinot noir, además de experimentos prometedores con riesling y el exótico gewürztraminer.
Un punto destacado de esta ruta patagónica del vino es la bodega Viñas del Nant y Fall, en Trevelin, pionera en la zona y clave para posicionar a la región en el mapa mundial del vino. Otra bodega notable es Casa Yagüe, cerca de Trevelin, que elabora vinos de chardonnay y cabernet franc, distinguidos por la crítica y los consumidores por su producción artesanal y su compromiso con la sostenibilidad.
Trevelin es, además, la primera IG de la provincia y la de mayor cantidad de viñedos, con cuatro bodegas.
Mientras tanto, de la misma zona, Contracorriente es una bodega que cuenta con cinco hectáreas donde cultivan las uvas chardonnay, gewurztraminer, pinot noir y riesling que la winemaker Sofia Elena transforma en vinos vibrantes, con mucho sentido de lugar.
Neuquén y Río Negro: un equilibrio entre historia y modernidad
La historia vitivinícola de Río Negro, con más de un siglo de tradición, contrasta con la modernidad de Neuquén. En el Alto Valle del Río Negro, bodegas como Humberto Canale, fundada en 1909, son guardianas de cepas históricas como el semillón y el malbec, que aquí toman perfiles delicados y elegantes. Otras se suman a la oferta de la ruta patagónica del vino, como la novedosa Mabellini, que acerca una expresión sabrosa y moderna de los malbec, cabernet franc y merlot de la zona, y Aniello, que combina técnicas ancestrales con innovación para crear vinos únicos con las cepas trousseau, pinot noir y merlot.
En Neuquén, San Patricio del Chañar ha convertido el desierto en un oasis productivo. Bodegas como Del Fin del Mundo y Secreto Patagónico no sólo producen vinos de alta calidad, sino que también lideran proyectos sostenibles. Los suelos pobres en nutrientes obligan a las raíces a buscar la profundidad, lo que potencia la concentración de aromas y sabores, un sello distintivo de este terroir.
Bodega Miras es, sin dudas, otra de las fundamentales de la zona. Desde Maniqué, Río Negro, brilla por sus vinos elaborados con uvas de viñedos añosos. El trabajo tradicional, a mano, da origen a vinos de gran jerarquía, con mucho potencial de guarda.
El vino y la gastronomía: una dupla perfecta en la ruta del vino patagónico
La experiencia enológica no estaría completa sin su contraparte gastronómica. El cordero patagónico, los quesos artesanales, las truchas y los hongos maridan a la perfección con los vinos locales. Familia Schroeder, otra de las bodegas destacadas de Neuquén, es un ejemplo sobresaliente de esta amalgama que destaca lo mejor de cada mundo.
Su restaurante Saurus Garden ofrece platos de alta gastronomía que los comensales disfrutan de vistas a los viñedos y el valle. La bodega alberga un secreto paleontológico: en sus terrenos se encontraron restos fósiles de un dinosaurio, que inspiró su línea de vinos «Saurus».
Bodega Malma también ofrece, en San Patricio del Chañar, la posibilidad de combinar sus vinos con la mejor gastronomía local. En Malma Restaurant, el menú se sostiene sobre los productos regionales -cordero patagónico, langostinos de Puerto Madryn, vegetales y frutas de estación-, con un marco bello e imponente para disfrutar de una experiencia perfecta.
Un terroir extremo y fascinante
La naturaleza patagónica es, sin dudas, la que marca profundamente la producción vitivinícola de la región. La constante exposición al viento, la gran amplitud térmica y los suelos pobres crean condiciones únicas que dan como resultado vinos frescos, con alta acidez y gran expresividad aromática.
La región está prácticamente libre de plagas, lo que permite prácticas más orgánicas y sostenibles, iniciativas que implican un profundo respeto por los ciclos naturales, el cuidado de los recursos y la conexión con el ecosistema. Bodega Agrestis en Río Negro y Bodega Otronia en Sarmiento, Chubut son, dentro de esa zona, pioneras en técnicas sostenibles y ecológicas.
Riberas del Cuarzo se ha sumado recientemente como una de las bodegas más enfocadas en la expresión más pura del terroir patagonico desde su viñedo de Valle Azul, un paraje majestuoso donde la naturaleza permite obtener vinos que ya conmueven a los paladares más exigentes.
Experiencias enoturísticas únicas
La ruta patagónica del vino no se limita a degustaciones. Las bodegas han innovado en propuestas turísticas, ofreciendo paseos a pie por los viñedos, recorridos en bicicleta, catas nocturnas bajo cielos estrellados y talleres de cocina autóctona.
En bodega Humberto Canale, los visitantes pueden realizar visitas guiadas que permiten sentir la experiencia patagonica con recorridos por los viñedos, participar en la cosecha, degustar diferentes varietales de viñedos historicos, disfrutar experiencias gourmet e incluso materializar el sueño de disfrutar de una flotada en el río Negro.
En Neuquén, Familia Schroeder organiza cenas a la luz de las velas y visitas guiadas a sus galerías, incluida la cava del dinosaurio.
El resurgir del semillón y otras cepas olvidadas
Emblema en la ruta del vino patagónico, Río Negro está al frente del actual fenómeno del renacimiento del semillón, una cepa que había caído en desuso en otras regiones de Argentina.
Sus vinos blancos, con aromas cítricos y notas de miel, están ganando reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional.
Por su parte, el malbec rionegrino también tiene algo diferente para aportar. Esta variedad patagónica tiene un perfil más delicado y floral en comparación con su versión mendocina. Bodegas como Miras, Humberto Canale, Matías Riccitelli, Fin del Mundo y Aniello están a la vanguardia de esta recuperación, elaborando vinos de autor con un enfoque en la biodiversidad y la expresión del terroir.
