¡Hola, wine lovers! ¿Cómo los trata el cambio de estación? Aquí en Mendoza, después de experimentar mi primera vendimia en Sudamérica -que fue muy interesante y muy compleja-, llegó el frío. Así que aproveché para quedarme adentro y escribir un poco.
El 11 de junio -aunque algunos dicen que es el 13- se celebra el Día Mundial del Vino Rosado. No sé ustedes, pero yo me fui volviendo fan de estos vinos que están causando una revolución en todo el mundo.
Estados Unidos ya era un gran consumidor de vinos rosados, sobre todo en esta época del año. Porque mientras acá avanza el otoño, en el Norte ya se empiezan a vivir las jornadas más calurosas. ¡Y los rosados se vuelven indispensables!
Día Mundial del Vino Rosado
Aquí, en Argentina, tierra famosa por su Malbec -que es como el Messi de los tintos-, están sucediendo cosas muy interesantes alrededor de los rosados. Te cuento: aunque la mayoría de los rosados se elaboran con Malbec, también se están animando a hacerlos con otros varietales.
Otra tendencia que crece es la de mezclar uvas tintas elaboradas como rosé pero con un touch de uvas blancas, como Torrontés o Semillón. El resultado es, por supuesto, espectacular.
Sé que no todos los wine lovers están en tema y quizá no saben cómo se elabora un vino rosado: se hacen siempre a partir de uvas tintas que se pueden vinificar como blancas. El leve contacto del jugo de la uva con los hollejos tiñe suavemente el vino, y así se puede obtener un color rosado muy sutil, ligero. En otras ocasiones, se dejan los hollejos de la uva tinta en contacto durante algunas horas con el jugo para darle un poco más de color.
Y atención, los rosados suelen tener una graduación alcohólica mucho más suave que la de un vino tinto, incluso muchas veces puede ser menor que la de un blanco.
La clave está ahí: justamente por lo que les conté, los vinos rosados son realmente versátiles, fáciles de beber -siempre fríos, no nos olvidemos-. Los expertos recomiendan tomarlos idealmente entre los 9 y los 11 grados, por eso el Nicky ´s tip de hoy es que, una vez abiertos, lo mejor es conservarlos en una frapera para disfrutar al máximo de todas esas expresiones frutales y florales.
Mi TOP 10 de rosados favoritos
En las góndolas se puede encontrar una gran diversidad de colores. Pero además, una característica de los rosados son las botellas. ¡Son una belleza! Parecen de perfumería, con tapones de vidrio, especiales y etiquetas muy delicadas y llamativas.
Si quisiéramos mencionar a los productores que resaltan haciendo vinos rosados serían muchísimos, porque es una categoría que creció y se amplió mucho en los últimos años. Lógicamente, hay algunos que hicieron escuela.
Es el caso de Susana Balbo con su vino rosado que parte de un corte de uvas que lo hace muy sutil. Algo similar pasa en el caso de Bodegas Lagarde, que tiene un vino rosado orgánico muy exquisito
–Lagarde Organic Rosé-, elaborado a partir de un vino blanco al que le agregan vino rosado, a partir de uvas tintas de Malbec que le dan esa tonalidad tan bella que podemos ver en sus botellas.
Las Perdices propone su Exploración Rosé, con 100% Malbec, que me llamó la atención por provocar cierta sensación cítrica y por sus notas de cereza, guinda y frutilla.
No se queda atrás Bodega Mendel, que ofrece un rosado muy atractivo, bautizado con el nombre de Rosalía.
En materia de botellas, una súper pintoresca -bajita, que recuerda a los vinos antiguos- es la de Cuchillo de palo, un proyecto que elabora los vinos con uvas del Valle de Uco y apuesta al Pinot Noir para sus rosados.
Otras casas que confiaron en el Pinot Noir para sus rosados son Domaine Bousquet, con su Gaia Rosé, elaborado 100% con uvas orgánicas, y Humberto Canale, con Old Vineyard Rosé Pinot Noir, a partir de viñedos que datan de 1969.
Una curiosidad muy interesante es el Ver Sacrum, un vino elaborado con uvas del sur de Francia, es decir, con Garnacha, Mourvedre y Syrah. El resultado es muy curioso y exquisito.
Hablando de Syrah, también resalta Alpamanta Breva Rosé Syrah, un rosado ligeramente especiado, joven y fresco.
Finalmente, mi rosado favorito a partir de uvas Cabernet Franc es Andeluna Blanc de Franc, con un conjunto aromático donde se perciben rosas blancas y jazmines.
Por el grado de intensidad que se está logrando con los rosados argentinos, se van convirtiendo en una alternativa fresca e ideal para una amplia variedad de comidas y que acá en Argentina se disfrutan muchísimo: para la típica picada de quesos y fiambres, para acompañar unas deliciosas empanadas, una pizza y, por qué no, hasta maridar con achuras, chorizos y morcillas.
Levantemos la copa, entonces, por los rosados, que tantas alegrías nos pueden dar.
¡Hasta el próximo brindis!