Aunque se trata de una celebración tradicional para los Estados Unidos, el Día de Acción de Gracias es una fecha ya conocida en el mundo entero. Para quienes la festejan, se trata de una invitación a disfrutar de la familia y las amistades, agradecer los buenos momentos y, por supuesto, compartir una gran mesa.
El menú clásico, ese que hemos visto en tantas películas con las que crecimos, se organiza alrededor de un gran pavo rostizado, gran cantidad de guarniciones y postres. En ese contexto de abundancia, no puede faltar el aliado capaz de darle el marco perfecto a la ocasión: el vino. ¿Por qué no elegir un buen vino argentino?
Es cierto: esta pregunta se puede responder con otra. ¿Cómo y cuál elegir entre tantas opciones? Para no perderse, compartimos a continuación algunas ideas para que el vino argentino se convierta en el complemento perfecto para celebrar este día de Acción de Gracias.
Acción de Gracias: conectando sabores
La cena de Acción de Gracias puede resultar en un desafío para cualquier maridaje. Entre las guarniciones tradicionales —puré de papas, coles de Bruselas, camotes dulces y salsa de arándanos— y el protagonista indiscutido, el pavo, se nos ofrece una sinfonía que combina sabores dulces, ácidos, salados y especiados. La clave estará en elegir vinos versátiles y fáciles de beber, que se adapten a esta diversidad de estímulos sin complicaciones.
Un buen consejo: olvidarse de las reglas estrictas. Esta no será la ocasión para los debates sobre la combinación ideal, plato por plato. Más bien, recomendamos aprovechar la excusa de Acción de Gracias para armar una selección variada que sea del gusto de la mayoría de los invitados.
Opciones clásicas que nunca fallan
Si la idea es mantenerse en un terreno seguro, conviene optar por vinos que ya se han ganado un sitio de preferencia en las mesas festivas.
Sin dudas, por su versatilidad los vinos de pinot noir son clásicos de las mesas de Acción de Gracias. Estos tintos ligeros, con frescura y notas de frutas rojas, se llevan muy bien con la suavidad del pavo y sus acompañamientos. Provenientes de Patagonia y Valle de Uco (Mendoza) se pueden encontrar etiquetas frescas y elegantes. Por ejemplo, desde la altura mendocina sugerimos Salentein Reserve, Serbal de Bodega Atamisque y, si se busca algo más sofisticado y exclusivo, Domaine Nico La Savante es ideal para sorprender a quienes son fanáticos de borgoña.
Ahora bien, desde Patagonia, tres pinot noir recomendables son Barda de Bodega Chacra, Saurus de Familia Schroeder o 45 Rugientes, elaborado por Otronia en el viñedo más austral del mundo.
Por otro lado, ideales para equilibrar los sabores dulces y ácidos de las guarniciones, los vinos blancos argentinos pueden cautivar con su acidez vibrante y eso es perfecto para quienes buscan algo diferente. Entre las cepas que mejor se van a comportar en la mesa de Acción de Gracias hay que destacar al semillón. Entre las distintas opciones de esta variedad, se puede optar por el de Mendel o el patagónico Humberto Canale Old Vines. También los sauvignon blanc son una alternativa y entre estos, destacan Sophenia Synthesis de Mendoza o desde los viñedos de Buenos Aires, próximos al Atlántico, Costa y Pampa Sauvignon Blanc.
Otra elección infalible y necesaria para toda mesa festiva son los vinos espumosos. En este sentido, Argentina tiene botellas increíbles para ofrecer. Ya sean con brut nature o extra brut, Argentina propone burbujas chispeantes que logran limpiar el paladar entre bocado y bocado, además de garantizar buenos brindis. Indispensables son Rosell Boher Grande Cuvée Millésimée 2019 y Cruzat Single Vineyard Finca la Dama Extra Brut mientras que otros que se lucirán fácilmente son Barón B Brut Nature, Bressia Royale Brut Nature y Teho Espumante. Todos elaborados por el método champenoise, a esta altura, una especialidad local.
Para explorar más allá de los clásicos en Acción de Gracias
Si lo que se prefiere es salir de lo convencional, hay vinos que pueden aportar un toque inesperado pero delicioso a la mesa.
Entre las curiosidades argentinas del segmento de vinos blancos secos, los Riesling de Doña Paula o Luigi Bosca, el Gewürztraminer de Rutini o el Old Vines Torrontés de El Esteco pueden ser la excusa para una larga charla en la mesa de Acción de Gracias.
Por su equilibrio entre fruta y acidez, los rosé argentinos se han instalado como una opción perfecta para quienes buscan algo ligero y festivo. Los que recomendamos buscar para sorprender son Gran Lurton Rosé de Pinot Gris y Cabernet Franc de Los Chacayes, Susana Balbo Signature Rosé de Malbec y Pinot Noir, y Saint Felicien Rosé de Grenache, Syrah y Malbec.
Por último, hay que destacar que varias bodegas ya apuestan a sus back vintage para demostrar el potencial de envejecimiento de los vinos argentinos. Sin dudas, descorchar una botella antigua de algún terroir argentino se puede convertir en una experiencia inolvidable. Ante esto, una opción es buscar los vinos de Bodegas López, y entre ellos su Montchenot, corte clásico de de cabernet sauvignon, malbec y merlot que llega al mercado al menos 10 años después de su nacimiento. Por todo esto, este vino puede convertirse en la estrella del brindis, especialmente para aquellos que valoran la tradición y el refinamiento.
Para agradecer y compartir
Más allá del maridaje, durante Acción de Gracias el vino sin dudas debe ser otro vehículo para conectarse con la familia y las amistades. Entonces, qué mejor momento para abrir esa botella especial que venimos guardando para un momento único.
No importa si es un gran malbec de Altamira, un cabernet franc del Valle de Pedernal, un Pinot Noir de Patagonia o un Tannat de los Valles Calcahquíes. Lo importante es el acto de compartir y disfrutar juntos.
Y si aún la cuestión del vino no está resuelta, aprovecha estos días y busca en tu wine store de confianza alguno de los vinos argentinos que hoy marcan tendencia en el mundo y que muy pronto serán clásicos entre los fine wines. Por ejemplo, Cheval des Andes, elaborada conjuntamente por Terrazas de los Andes y Cheval Blanc en Mendoza, Altura Máxima Malbec proveniente de un viñedo de Bodega Colomé a 3.111 metros de altura en el noroeste argentino o Piedra Infinita Malbec de Zuccardi, una de las etiquetas más premiadas del país.