Fundada en 1910, en Barrancas, Maipú, Finca Flichman es una de las bodegas más antiguas de Mendoza: produce vinos considerados patrimonio de la escena vitivinícola local reconocidos en todo el mundo.
Con la enología a cargo de Rogelio Rabino, esta bodega centenaria (que pertenece al grupo portugués Sogrape desde 1998) vive hoy un proceso de modernización que respeta la esencia clásica que la hizo famosa, siempre enfocada en el origen de sus vinos.
“Todas nuestras líneas están pensadas desde el terroir con un fuerte hincapié en la sustentabilidad del viñedo”, comparte el winemaker.
En la actualidad, Finca Flichman es la bodega referente de Barrancas donde cuenta con viñedos propios, además de tener cultivos en Tupungato, Valle de Uco.
Desde la reciente incorporación de Rabino al frente del equipo de enología, la bodega retomó su rol de liderazgo entre las y los productores de Barrancas al impulsar una puesta en valor de este terroir histórico de la provincia.
Finca Flichman, referente en Barrancas
“Hoy trabajamos junto a otras bodegas en el estudio en profundidad del suelo y los vinos de Barrancas, para poder comunicar el conocimiento sobre lo que creemos es uno de los terruños más importantes de Mendoza”, comenta.
“Esta zona está ubicada a 700 metros sobre el nivel del mar, lo que nos asegura una importante amplitud térmica. Sus suelos son muy pobres y pedregosos, pero lo más importante es que las variedades de ciclo largo, como Cabernet Sauvignon, Syrah, Cabernet Franc y otras, se adaptan muy bien. Es además una zona con muchos viñedos antiguos, por lo que se suma entonces esa genética ancestral que ayuda a lograr vinos muy complejos, de alta calidad”, explica el enólogo.
Pioneros en sustentabilidad
Un aspecto clave de la producción en Finca Flichman es su compromiso con el medioambiente: “siempre fuimos pioneros en todos los procesos de manejo de sustentabilidad y somos una de las primeras bodegas certificadas. Además, tenemos el programa global de la Sogrape, por lo que trabajamos en conjunto con bodegas de España, Portugal, Chile y Nueva Zelanda, con objetivos fijados para 2030 y 2050”.
Detalla: “estos objetivos son muy importantes e involucran muchos aspectos, desde lograr un impacto ambiental neutro y conservar la biodiversidad; apoyar el desarrollo económico y social local, contribuir activamente al empoderamiento de las mujeres y promover las prácticas sostenibles dentro y fuera de la bodega, entre muchos otros”, explica Rogelio Rabino
En enero de 2020, la bodega certificó su Protocolo de Sustentabilidad de Bodegas de Argentina, lo que implica el cumplimiento de requisitos asociados al tratamiento del viñedo, la calidad, el medioambiente, los recursos humanos y la relación con la comunidad.
Una baja contaminación, eficiencia en la utilización de los recursos y el uso de energía sustentable es el trípode del compromiso que sostiene la política de esta histórica bodega.
“Estamos muy enfocados con el trabajo de sustentabilidad y nuestro impacto en la comunidad. Ya logramos disminuir la cantidad de agua necesaria para la producción de las uvas y buscamos el autoabastecimiento energético con el uso de paneles solares. Hoy logramos alcanzar entre el 5 % y el 9 % de la energía necesaria”, aporta Rabino.
Además, Finca Flichman obtuvo la certificación global BRC Food Certificated que garantiza que la bodega cuenta con procesos y productos certificados en cuanto a su calidad y seguridad alimentaria.
“Esta es una de las certificaciones con estándares más altos en cuanto a inocuidad y trazabilidad y nos permitió ingresar a mercados muy exigentes”, dice Rabino.
Grandes reconocimientos para Finca Flichman
Durante 2022, Finca Flichman recibió importantes galardones de prestigiosos críticos internacionales. Tanto James Suckling, en su habitual informe Annual Report Argentina 2022; como Tim Atkin, en la publicación anual Best Of Argentina 2022 Report, dieron altas puntuaciones a una docena de etiquetas elaboradas por Rabino.
Además, la bodega obtuvo una medalla de Master y una para sus vinos DEDICADO Microterroir Sand & Silt 2019 y DEDICADO Gran Corte 2019 en The Global Malbec Masters 2022, competencia organizada por la revista británica The Drinks Business.
“Estos reconocimientos nos confirman el rumbo que hemos tomado con el estilo internacional de nuestros vinos y la buena relación precio-calidad, ya que somos una bodega presente en 60 países”, explica el enólogo.
“Estados Unidos, Inglaterra y Brasil son nuestros principales mercados y nos hemos consolidado en cada una de estas plazas con diferentes vinos. Por ejemplo, con el Syrah y el Cabernet Sauvignon en Gran Bretaña; mientras que en Estados Unidos el Malbec es la variedad más fuerte, seguida por el Chardonnay. Igualmente, la complejidad y la elegancia de los vinos de la bodega siempre nos abren las puertas en todos lados”.
En medio de este proceso de cambio y consolidación del portfolio, Finca Flichman lanzó 12 etiquetas nuevas en el último año y medio, especialmente en líneas de media y alta gama. “En cuanto a cepas, el Malbec es nuestra variedad insignia, pero también relanzamos un Syrah de un antiguo viñedo de Barrancas; estamos trabajando con el Cabernet Franc y tenemos proyectos para adaptar nuevos varietales portugueses”, finaliza Rabino y reafirma el camino de Flichman en la búsqueda de vinos que combinan tradición y modernidad con fuerte compromiso sustentable.